Puente Largo sobre el Río Jarama
"El Rey de los Puentes"
Según describe Don Juan Antonio Álvarez de Quindós, en su libro
(Texto y ortografía, original del autor)
Don Juan A. Álvarez de Quindós dice así: En la
TERCERA PARTE
EDIFICIOS DEL REY Y POBLACIÓN DE ARANJUEZ
En el CAPITULO XIV
Puentes y barcas de paso en los rios Tajo y Xarama
Págs.278-282
Una de las particularidades que hacen mas nombrado a Aranjuez es unirse en su término los dos caudalosos ríos Tajo y Xarama, y que perdiendo este aquí su nombre, corra aquel más opulento y ufano a las faldas de la imperial ciudad de Toledo. Esta junta de los ríos se hacía en otro tiempo más baxo de donde dicen de la Huelga de Aranjuez, como se manifiesta en un planecito que hay en la Contaduría en un antiguo libro de rentas. Una creciente de Xarama corto por la dehesa de Requena, dexando desayrado al Tajo, y a este lado el soto de Chachavillas y el Legamarejo. Obligado este de la burla, abandono su antigua madre, y volviendo apresurado un poco hacía el norte, rompió entre ambos sotos, buscando la proporción de unirse con Xarama al fin del Legamarejo, donde hoy se ve, formando un bello y delicioso espacio cubierto de altísimos y espesos álamos, que acompañan al susurro y golpeo de las aguas que vienen de uno y otro lado. Aquí se hizo un pabellón vistoso para cuando los reyes querían gozar de este apacible y grato recreo, y una calle de álamos negros forma un paseo hasta la misma confluencia de los ríos desde la puerta de las huertas grandes, que se llama la calle de Lemux.