Canales de la Azuda o
del Embocador y Caz Chico
En sus Págs. 649, 650, 651, 652, 653, 654, 655.
El complejo y ramificado de la Azuda (antes, del Embocador), uno de los elementos básicos del primitivo plan de riegos de Aran juez, fue mandado construir por Felipe II para abastecer los jardines del rey y “regar las huertas del heredamiento hasta el rincón de Pico Tajo”, al mismo tiempo que resolvía las necesidades domésticas de la población. Juan Carlos de Miguel y Cristina Segura avanzan la fecha de 1572 como la de la orden real para el inicio de su construcción, pero otros autores sitúan el fin de las obras antes de esa fecha e, incluso, algunos retrasan el inicio de las mismas a 1535, a la par que se construye el canal de la Aves.
Arranca a unos 350 metros aguas arriba de la presa del Embocador (“más arriba de la dehesa de Gulpijares”), cerca de Villaconejos, y hoy día proporciona el agua a los cultivos y huertas de la orilla derecha del tajo. Con objeto de ampliar su capacidad de riego, en 1762 se construyó en el primer cuartel de su trazado el canal denominado Caz Chico, asimismo conocido como del Medio (la segunda bifurcación se denomina acequia del Cortijo), que, en una longitud de 3820 metros, fertiliza las tierras del Cortijo de San Isidro, vertiendo en el canal de la Azuda propiamente dicho sus aguas sobrantes alrededor de medio kilómetro antes del puente del Vadillo de los Pastores, donde finaliza el referido cuartel. Aquí se alza también una casilla de guarda, muy transformada, que en su origen constaba de cinco habitaciones y cocina repartidas en dos plantas, y que contaba con un pequeño corral y una cuadra, además de la sala de maniobra de compuertas. La construcción era de ladrillo y piedra de yeso sobre una base de sillería, cubriéndose con teja árabe.
El canal de la Azuda tiene un desarrollo global de 7717 metros y, además de alimentar los campos del Cortijo, riega entre otros los del Rebollo (junto al jardín del príncipe. Mediante el malecón del rebollo y el malecón de En medio) y los de las Tejeras, desaguando en el Jarama antes de que se produzca la desembocadura de éste en el Tajo 2.5 kilómetros más adelante. En su primer tramo recibe las aguas del canal de la Cola Alta, a través del Caz Chico, que las acoge en el sitio de la Yesería, y del canal de la Cola Baja mediante pequeñas caceras de derivación (en el inicio, junto al cruce de la carretera de Aranjuez a Villaconejos), ambos canales prolongaban la acequia de Colmenar o del Tajo.
La Azuda da lugar a su vez, en el segundo cuartel, que acaba en las Doce Calles, a diversas acequias, como el malecón de la Cenizosa, las caceras de Pileros, de Chopos y de la Fuentecilla, y el desaguador de los Suizos, que cruza la antigua carretera de Andalucía con un puente de sillería y hormigón.
Finalmente, en su última parte, al otro lado de dicha carretera, el canal “entra en las grandes huertas de Pico-Tajo, derramándose en caceras maestras y particulares para regarlas todas”; sus principales ramales corresponden a los caces de la Cola Alta y de la Cola Baja, que se encuadran en el cuarto cuartel. El tercero termina en la puerta de Cirigata y cuenta con las caceras de la calle Sinsalida y Cangrejera, que llegan unidas al Tajo en la zona del puente de la Isleta; con la de la Higuera, que vierte en la Cola Baja;