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Real Coliseo
Carlos III
Según describe Don Juan Antonio Álvarez de Quindós, en su libro
(Texto y ortografía, original del autor)
Don Juan A. Álvarez de Quindós dice así:
En el CAPITULO XIII
de la TERCERA PARTE
Teatro y plaza de toros
Págs.269-271
Con tantas comodidades como se proporcionaban para hermosear y engrandecer Aranjuez era indispensable pensar en diversiones públicas, que recogiesen y diesen ocupación honesta al gran número de cortesanos y caballeros de la Real servidumbre. Con este objeto se permitieron algunas representaciones cómicas, que por el año de 1765 se hiciéron en una casa particular; y despues formó en la suya Don Antonio Penaso un pequeño teatro ó coliseo bastante bueno, que ahora sirve en algunas ocasiones para volatines.
De estos pequeños principios, y á fin de que no careciesen aquí de quanto puede disfrutarse en la Corte de Madrid, se mandó construir por cuenta del Sitio en el año 1767 un teatro mas capaz en la calle de San antonio, por planes del Director Don Jayme Marquet, proporcionado a la concurrencia de la jornada, con gran foro, dos líneas de aposentos, alto y principal y delante de estos una galería alrededor con dos órdenes de sillas para caballeros, y las demas divisiones para hombres y mujeres, que llaman tertulias. A la entrada un pórtico con graderías y arcos de ladrillo, en cuyo fontispicio se grabó en una piedra esta inscripción de Don Juan Iriarte, que fue Oficial mayor de la Secretaría de Estado.
Ruris delicias urbana adjecta
Voluptas jussu Carolo III.
Anno MDCCLXIX.
Los primeros años se representaron óperas italianas, y tragedias y comedias españolas, con bayles figurados por famosas compañías de actores, y magnificencia en decoraciones, y vestuario que se surtia de cuenta del Rey: hoy está por empresario.